FOTO CABECERA: PABLO COBOS
1.- Víspera. 16 de mayo. 99 aniversario del adiós del Rey de los Toreros. Una cosa estaba clara, al día siguiente toreaba Román en Madrid. Su gran tarde de Fallas seguía en nuestra memoria, por eso la foto:
2.- Aparecía Román en Madrid en la primera de las dos tardes anunciadas junto a Joselito Adame y Álvaro Lorenzo. Los toros, de El Tajo y La Reina, eran de otro Joselito. Pero le correspodió primero un sobrero de Torrealta gigante. Como dos vísperas atrás le habían regalado una puerta grande a Perera, la petición de trofeo ante la entrega de Román quedó en vuelta al ruedo. «Valor, actitud y la búsqueda del toreo por abajo». No hay imposible.
3.- Torero en Madrid con todas sus consecuencias. Sin dar un paso atrás. Román trascendía a una tarde plomiza. Las cosas estaban claras.
4.- «Todo es por tí». El regreso a Las Ventas quedaba para el día 30 de mayo. La tarde de mayor expectación de todo San Isidro.
5.- La de Adolfo Martín con Roca Rey. Pero en su primer turno…
6.- Con un puntazo pasaría a la enfemería. De ella salió gigante, a cuerpo limpio, en el justo momento en que Manuel Escribano caía herido de gravedad y era conducido a la enfermería. El contraste fue brutal: una de las imágenes de la Feria. Luego al quinto de Adolfo Martín Román le cortaba la única oreja de la tarde tras cuajarlo muy despacio, muy por abajo y muy puro. Y puso a todos de acuerdo una faena que marca un antes y un después en la carrera de un torero.
7.- Un día para no olvidar por mucho motivos. El San Isidro de Román parecía haber acabado ahí. Salíamos de la plaza y no dejaban de darnos la enhorabuena.
8.- Pero la lesión de Emilio de Justo le ponía en suerte la carambola Nimes-Madrid-Vic Fezensac. Un reto, mucho en juego y la certeza del clarividente momento del torero y su valor a flor de piel. Nimés y Vic, su Francia materna. Y Madrid, la que le pone y saca lo mejor de sí mismo. De verdad, se había puesto un bonito fin de semana.
9.- Y no faltaba quien ladrase.
10.- Allá que iba un torero. Con todas las consecuencias. En Madrid esperaba la de Baltasar Ibán. Silencio. No hay tuit que valga. No iba a ser una tarde fácil ni cómoda. Si se volvía a Madrid era por algo.
11.- Tras ver el muslo abierto solo quedaba decir #FuerzaRomán y fuerza don Máximo
12.- La gesta ahí quedaba.
13.- Visto el parte, respirábamos.
14.- Cuando salíamos de la plaza, la ambulancia subía la calle Alcalá abriéndose paso entre el tráfico. Hasta ahí hubo torería.
15.- Y de nuevo regresábamos a València. Los últimos 350 y pico kilometros. Una vuelta al ruedo, dos orejas, un puntazo, una cornada tremenda y la certeza de estar ante un torero descomunal a su paso por el San Isidro 2019. Aquí, a Las Ventas, regresaremos contigo.
16.- No. No podéis olvidar el San Isidro de Román Collado.
17.- De madrugada el torero volvía a pasar por quirófano.