FOTO: PACO HARO
Las huellas de Román en la Feria de Fallas 2019 quedan para el recuerdo. Por lo que fueron y más todavía por lo que pudieron ser. Inmejorables sensaciones. Sólo falló la espada, pero el impacto de Fallas ahí quedó: «Sí, está claro que fue una tarde impacto. Mucha gente no esperaba que pudiera estar a ese nivel. Y eso me gusta, cuando sorprendes tanto a la gente. Pero claro, lo que me hubiese gustado es tener las cuatro orejas en la mano.» Son declaraciones de Román al programa CULTURA DE BOU. Ahora el torero de Benimaclet (València) mira al mes de mayo, sobre todo a San Isidro. «Me gusta como voy a Madrid. Son la ganaderías que yo había pedido. Mato la corrida de Joselito, con la que ya salí a hombros en Las Ventas. Y la corrida de Adolfo Martín, que el año pasado echó el toro de la feria y en Castellón también lo acaba de echar». La primera es el 17 de mayo, cinco días antes torea además en Aguascalientes (México) y la segunda en San Isidro es el 30 de mayo.
– Y encima vas con aquel. ¿Ahí descargas un poco la presión?
«Sí, y encima con Roca Rey. Vamos, que seguro va a ser uno de los acontecimientos del año. Pero al final es Madrid y siempre se tiene presión.»
El impacto de Fallas ahí quedó. Fue una tarde en la que no se vio solo un Román, se vieron dos o tres: «Sí. Cada faena tuvo sus momentos. En el primer toro -‘Damasco’ de Fuente Ymbro- hubo un poco de locura, que también es un poco de Román. Luego poderle al toro, un toro tan encastado que no es nada fácil. Y el otro fue un toro con clase y en el que se vio que Román también sabe torear.»
– ¿Confiabas en el fondo de ese segundo toro, de ‘Lavandero’?
«Sí, sobre todo lo que le veía era nobleza. No sabía lo que iba a durar, y por eso lo administré un poco y hasta la tercera tanda no le apreté al toro.»
– El ganadero también tuvo fe y también estaba asombrado de cómo estuviste con ese toro. ¿Es una faena que te llena más como torero, no?
«Eso es bonito. Hay tardes en las que no echas un tarde tan redonda y al final cortas una y una. Pero no se puede comparar con las sensaciones que viví yo ese día en Valencia…»
– De una y una podría haber sido una tarde como la de Castellón.
«Exacto. A eso me refiero. La tarde de Castellón podría haber sido de una y una, pero en ningún momento sentí lo mismo que en València. También es verdad es que fueron toros muy distintos, ganaderías muy distintas.»
– Lo de El Pilar ya en sí es complejo, diferente.
«Sí. Es un toro que no conocía mucho. A mi la corrida para estar delante no me gustó.»
– Para estar delante no era fácil, pesaba.
«Sí, la típica corrida que no dicen mucho los toros, pero si les alivias protestan, si los aprietas también. No fue una corrida fácil para el torero.»
– ¿Y al final qué balance haces de marzo?
«Ha sido un mes de marzo que podría haber sido muy importante en mi carrera pero ha quedado al final en ‘que bien ha estado Román, pero a seguir luchado’. Ya llegará.
– ¿Tenías la sensación de empezar de cero esta temporada?
«Todas las temporadas se empieza de cero prácticamente. Van pasando los años, la gente me ha visto y el factor novedad ya no existe. En enero ya me notaba a ese nivel que voy a dar próximamente.»
– El nivel de estas Fallas me recuerda al de Zaragoza en octubre de 2017.
«Sí, totalmente. Con el segundo toro de Fuente Ymbro hay momentos que me recuerdan mucho al de Zaragoza de Robert Margé… Y fíjate que me pasó lo mismo, que lo pinché…»
Sí, sí… porque aquel también eran dos.